miércoles, 26 de agosto de 2015

el mundo esta repleto de errores, cuando escribo los cometo, cuando intento defenderme, primero por eso los cometo, cuando  busco crear juicios sobre personas los cometo, en resumen cuando despierto lo cometo, no debería despertar jamas si buscara dejar de equivocarme, pero aun despierto.

Podría tomarme todo lo que escribo enserio, pero encuentro cosas del pasado nada fascinantes y cosas del presente fuera de contexto...

lunes, 13 de julio de 2015

Curiosamente se duerme bien,
Se despierta tranquilo,
Sin la idea de los viento que vienen,
Del clima a lo lejos.

Se descansa lo suficiente,
Lo de horas en solo minutos,
Para ser firme, inquebrantable,
Resistente al viento violento.

Del otro lado creándose la tormenta
De emociones, los anhelos,
Sueño que se aproximan
Y el miedo, el "irracional" miedo.

Inútil criatura

Tan inútil como el infinito,
sin llegada, ni partida,
Nada de sabor y olor,
Solo mundanas simplezas.

No llegas a ser, solo respiras,
Consumiendo lo poco de otros,
Añorando  suficientes esperanzas,
Para justificar mañana seguir vivo.

Vamos a ver el cielo,
Tu seras una nube en el nocturno,
Casi nulo, inexistente e infortunado,
¿Son las estrellas tu peor enemigo?
No, siempre fuiste tu quien se opaco.

Con todo ese odio,
Con toda esa cobardía,
Y decías "jamás escribiré de amor",
Mientas su falta a ti, te destruía.

viernes, 6 de marzo de 2015

La tragica virtud de ser indigerible

Infinidad de muestras de falta de respeto, intolerancia, desmesurado despreció y un sin fin de acciones que acompañan la destrucción de conductas socialmente aceptables, son la causa de que ahora me encuentre en soledad, sentado en el piso de la cocina intentando explicar el porque de tragica virtud de ser indigerible.

Soy un profesional maginifico, un camarada mental fenomenal pero como individuo social... el horror, el horro. Debería de sentirme mal, de ser usado como vínculo para otros medios, debería de añorar que miren mis virtudes y las aprecien,  debería aspirar a ser un centro, un objetivo, una razón, debería sentirme mal con mi vida social, debería... pero no lo siento. Pero no es esto algo de lo cual jactarse, es despreciable como las personas usan la incapacidad social como un medio de rebelión o dureza genial, "lobo solitario sin amor que busca el lugar en la tierra lo mas despoblado para vivar en paz, porque tiene fobia social y no soporta lo imbéciles que son los otros"
¿Quién carajos les explicó que los lobos son solitarios?... hasta donde se habitan en manadas de mas lobos, maaaaaas lobos. Buscar un lugar dela tierra sin ningun habitante... supongo son lo suficiente autosuficiente para hacer tela para ropa y asi cubrir sus cuerpos del frio para empezar, somos una sociedad porque todos se benefician de todos en mutuo acuerdo ( no es asi siempre pero se puede partir de eso). Todos son imbéciles, todos somos imbéciles en algo siempre se es imbécil y todos en la mañana parecemos imbéciles y borrachos mega imbéciles y seudosabios también imbéciles, yo ahorita soy imbécil quejandome como imbécil de los imbéciles.

Infinidad de muestras de falta de respeto, intolerancia, desmesurado despreció y un sin fin de acciones que acompañan la destrucción de conductas socialmente aceptables, son la causa de que ahora me encuentre en soledad, sentado en el piso de la cocina intentando explicar el porque de tragica virtud de ser indigerible recae en ser imbécil.

miércoles, 18 de febrero de 2015

En ocasiones solo quiero sus abrazos y la promesa de un eterno.

¿Qué busco de la vida cuando no tengo nada? jamás lo supe, me deje llevar por la charlatanería de la existencia de algo.

Nos encontramos ocasionalmente, a veces no puedo detenerlo, me envuelves y encuentro la paz, así caigo en cuenta que el objetivo de la vida no es la alegría si no la tranquilidad.

Retengo su nombre es solo de mi autoría, usted retenga mi cuerpo es su propiedad, no como las flores que son victima de la comprensión del pasto, sea el pavimento cruel y atrayente de pisadas fulminantes.

domingo, 15 de febrero de 2015

Conversaciones indecorosas.

IV.

- Le felicitó, al detener el pulso de quien siempre se jactó de ser grande. Desde mi nacimiento jamás imagine verme tan destrozado. Usted se ha ganado un lugar en el cielo o posiblemente en el infierno, seguro un lugar en la nada, pero en vida eso jamás importa, ahora en adelante se otorgará celebraciones a su nombre, banquete a sus actos y ceremonias a su gloria, el mundo le conocerá como quien derrumbó al obelisco, que siempre se jacto de estar en lo alto y ahora se cubre de lodo.

-...

- Le reconozco, el silencio la praxis simbólica de la prudencia.

- ...

- Lamentó abandonarle, me gustaría expresarle mi sentir, pero el nocturno ha tocado las puertas del cielo de mi mundo y la afectación visual, no es de ayuda ante la falta de luz... es demasiado lodo, del cual debo despojarme.

Agradezco a la dicha, nuestra muerte nos obligará a encontrarnos, en usted exprese todo lo que no dije y calle todo lo que termine contando, mi muerte le pertenece, adiós mi amor, es hora de vivir.

viernes, 13 de febrero de 2015

Conversaciones indecorosas.

III.

- Ayer pensé en un viejo amigo, el cual conocí en la tragedia de mi juventud, antes me visitaba constantemente, siempre que ne deprimia, jamás fui lo suficiente valiente como para tomar su mano y entregarme a la fatalidad.

-...

- Lo sé,  esa mezquina cobardía. La madurez llego a mi vida y aunque seguía visitándome, ahora en vez de invitarme a sus aposentos, solo se dedicaba a hacerme "crecer" o más bien... hacerle crecer.

-...

- La máscara, ella lo cambió todo, exactamente ayer pensábamos en eso, en como habíamos "cambiando", pero... todo fue mentira.

-...

- Sí, ¡todos mienten!, pero ella es la peor.

El regreso hoy y me habló como antes, de ese deseo de dormir entre rosas que siempre eh añorado,  del silencio y el alejamiento, de la infinidad de reproches que jamás cambiaron y ahora más que nunca, le creo.

-...

- Exactamente, no cambié, ni evolucione, sigo cobarde sin poder entregarme a la fatalidad, al menos desde hoy en adelante me toca hacerlo en soledad, como siempre lo estuve haciendo.

-...

- Yo le amo en la decadencia y le odio en la fortuna.

-...

- Gracias, usted también cuídese.

jueves, 12 de febrero de 2015

Conversaciones indecorosas.

II.

- Una sutil realidad, somos parte del viento, aquel que toca mis labios llega de manera indirecta a su oído. Y pensar que le expresé a la vida: ¡Soy de tu propiedad, a cambió de que en libertad de tragedias quede mi hipotálamo.

-...

-Lo se, es terrible la dicha.

-...

- El mundo esta sufriendo una terrible tragedia, estoy por desaparecer.

-...

- ¿Lo qué usted argumenta, forma parte de la realidad?

- ...

Adiós primavera, mentimos al mundo con desdén y grandeza, ahora me despojo de tu mascara, para sobrevivir con un trozo de piel lastimada pero real, con mi verdadera naturaleza mediocre, con mi vocabulario corto, con el corazón de pollo y los pies sucios.

Con esos errores que antes escondia, dejaré de "analizar" al mundo aparentando inteligencia de la cual carezco, hablare con las tres palabras que conozco y dejare de contestar " encantadoramente" cada vez que me corrijan.

Aceptaré que me dolió que el mundo me odiara, mintiera y olvidará; también cuándo critiqué me apunté cuatro veces con los dedos restantes, lastime para justificar mi odio, me jacte de lo que no  era y que conocí mas veces la envidia que el orgullo.

Mascara tanto años en mi vida, siempre imaginé que nos despediriamos un día inesperado.

-...

- Esto es lo último que aún conservó de ella, este trozo sucio de porcelana.

miércoles, 11 de febrero de 2015

Conversaciones indecorosas.

I.

- No reconocemos el momento en que la vida se acaba mi estima sombra, solo recuerdo dejar de llorar y empezar a reír.

-...

- Es usted como el silencio, una tentadora respuesta que jamás escucharé, los ruidos sordos serán el contexto y sus labios el deseó.

-...

- Esta relación que mantenemos, es la que usted desconoce.

-...

- Me temo eh errado, tiene usted conocimiento absoluto de ello, el silencio fue siempre la respuesta. Me preguntó ¿Qué le lleva a tanta precisión?

-...

- ¡El silencio! Ya me lo temía...
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jueves, 29 de enero de 2015

Quien va a odiarte

Ese el juego, ignorar la dicha de nuestro encuentro,  no dar importancia a quien cambiara la vida,  a quien tomara la felicidad para adornarla con sufrimiento y viceversa, así lo haremos, ya que tememos amar tanto que perder la vida sea un pretexto para honrarnos y  deseamos tanto un momento importante en la vida, que buscamos dañarnos.

No viviremos el desprecio de nuestro gesto, ni escucharemos las melodías entonadas por nuestra filosas lenguas; quedara en nuestra charlas imaginarias lo que en símbolos gritamos a los sueños. Me decepcionarías, caerías de mi pedestal por tu mundanalidad, pasa siempre con lo que se idealiza como un dios; no soy un ser soberbio, te fastidiaras también. Recuerdo que la primera vez que te mire, me pareciste un ser repugnante y para justificar mi interés te compare con el arte, fue tanta la vergüenza que sentía por interesarme en ti, más que en los demás, que  escribía en secreto - Ese ser cadente de virtudes, es el mal, el mal mismo - esa secuencia repetitiva que repetía para convencerme que eres un mal.


Lo hacemos bien, lo hacemos bien, nos vamos alejando, llorare en silencio rompiendo el pacto para observar como te alejas, deambulando va quien amo, voy separándome, nos estamos alejando.

Quien va a amarse.

 Cuando deambulo por las calles, aunque intente detenerlo termino observando a las personas, cuestionándome  ¿Qué serán se sus vidas? Tal vez a falta de una propia, o posiblemente viviendo muchas y en la caza de otras que agregar.  Sonrió,  es imposible no hacerlo, con esas respuestas, en ocasiones llego a la conclusión que soy mi propio payaso.
Las caras desconocidas son interesantes, pero las conversación con extraños, llegan a ser tan aburridas que termino disfrutando solo de lo que mi moralidad e inmoralidad pugnan. La costumbre es sencilla, salir al parque y deambular, sumergiéndome en la irrealidad de las vidas ajenas, descifrar los rostros y sus vicios, de eso trata el juego. De pronto un rostro conocido, una anatomía ósea familiar, ¿descifrable? Más que eso, aburridamente predecible.
-          Mantén la calma humano, solo sigue otro rumbo, cambia la dirección de tu paseo.
-          ¿Pero… y si ya me vio?...
-          Entonces toma una hoja de las que llevas en la bolsa del pantalón y disimula leerla, como si no le observaras.
-          ¿Pero me hablara?...
-          ¡Rápido! Toma los audífonos.
-          Los estoy buscando…
-          ¡Maldita seas! Esta enfrente, el gusto culmino.
-          Demonios, necesitamos una maniobra de escape para estos casos.
-          Y también buen humano, aprender a manejar la ansiedad ante la posible pérdida.
Entonces se encuentra observándome con una sonrisa y un gesto de saludo, el cual por cordialidad respondo, al fin, jamás me he jactado de ser descortés. Será una conversación corta, incluso solo el saludo de buenas noches, incluso solo quedara en el gesto de reconocimiento, pero para mi desgracia, siempre, ante el encuentro con un conocido, terminamos igual, en una inmensa charla sobre su vida.
Pero esa persona en especial me perturba, ese ente me molesta, simplemente no puedo.  Le miro y encuentro su rostro tan familiar que me perturba, me cansa su existencia, la manera en que el cerebro se sobre esfuerza en justificar cada una de las estupideces que llega a decir, simplemente no sé qué hacer con su vida y caigo en pensamientos primitivos por  la desesperación, anhelando simplemente  arrojarlo en el vacío. ¡Maldita sea! De todas las personas conocidas o desconocidas que tenía que tocarme ese ser, a quien tanto amo.
Es tan reconocible su imagen,  le miro todas las mañanas en el espejo, me enferma verle. Llevamos años así, no recuerdo el inicio pero  anhelo que llegue el final;  tengo el buen hábito de no tener memoria de las fechas conmemorativas de las tragedias, por desgracia el sí, y una vez al año al despertarme y acercarme a ver como el tiempo va lacerado la piel, se deja ver  con su sonrisa absurda, gritando ¡Feliz cumpleaños! ¿Por qué le amo? ¿Acaso no se ama lo que se tolera tanto? ¿No se ama lo que se perdona tanto? Se debe amar lo que se parece a nosotros, es un deber, es un mandato, es nuestra responsabilidad como seres evolucionados, amar lo que es uno por encima de lo que no es nosotros,  ya que quien…
Cuando deambulo por las calles, aunque intente detenerlo termino pensando en esa persona, cuestionándome  ¿Qué será de su vida? Tal vez a falta de actividad, o posiblemente teniendo muchas y en la caza de otras que agregar.  Sonrió,  es imposible no hacerlo, con esas respuestas, en ocasiones llego a la conclusión de que soy tan banal y estúpido que me avergüenza mi mundana existencia.
Las caras desconocías son repugnantes y la conversaciones, si la suerte está mi favor logran la inexistencia. En mi cabeza solo se reproduce continuamente la plática de la mañana, la persona que más conozco es la única que me interesa los demás pueden ahogarse en el pavimento. La rutina es sencilla, evito salir para no toparme con el mundo y cuando lo hago no miro a nadie, observó  aquello que puede ser similar, pero al final, siempre inmensamente diferentes. De pronto la fortuna y su rostro, se ve feliz, debo correr a su lado, le diré que ese saco le queda de maravilla y que el clima es fantástico aunque odie la humedad que excesivamente hoy se deja percibir. ¿No me miras? No,  no quieres saludarme, sé que me detesta, entiendo que me aborreces. Ya es tarde, te encontré, ese es el juego, tú corres y yo te someto, no soy tan predecible, no como tú lo eres. Sonrió a tu dirección acompañándolo de una sacudida de mano, ya me captaste, no eres bueno para ocultar esa mueca de desagrado, la disfruto, es como obtener  puntos por una buena técnica. Regresas el saludo y caminamos lentamente al encuentro, tu imagen me encanta, me fascina, atrapa todo los pensamientos que se pueden producir en mí, es lo único que aprecio de esa existencia tan absurda, esos ojos profundos, los labios diminutos,  esa  gesto de desdén,  el mundo piensa que vives enojado con él, pero no entienden que fue la genética la que te dio esas facciones, tu imagen es mi dicha, pero tus palabras, son tan insípidas que dan nauseas.
¿Cuánto llevamos así? Años, pero no sabíamos de nuestras existencias hasta que nos miramos a los nueve meses;  recuerdo todo, pero con excesivo gusto, como me imploras no  desaparezca  de tu vida, cuando la decadencia te alcanza y logras reconocer el mediocre ente que eres. De todas las personas conocidas o desconocidas eres a quien siempre deseo toparme, a quien tanto amo.  ¿Por qué te amo? ¿Acaso no se ama lo que se desprecia? ¿No se ama lo que se destroza? Se debe amar lo que no se parece a nosotros, es un deber, es un mandato, es nuestra responsabilidad como seres evolucionados, amar lo que no es uno por encima de que es como nosotros, ya que quien…






Ya juntos se observaron, sonrieron y comentaron el desarrollo de sus actividades en ese día, compraron algo dulce que disfrutar camino a casa y se amaron, ya que quien va amarse más que yo.


martes, 27 de enero de 2015

Indiferencia.

Recuerdo cuando escribía como loco, sobre el encanto de su piel desnuda, como en esos momentos perdía todo contacto con el tiempo y la realidad. Era la imagen de su hombro descubierto, una postal la cual deseaba escribir detrás de ella mientras me permitiera besar el borde de su existencia con el mundo. Así de insistente fue mi deseo, aun lo recuerdo, pero ya no lo siento.

Me harte del deseo, me fastidie de ese amor, la gente se angustia por no ser correspondida, se les olvida no tener el control del anhelo ajeno y esa necesidad de poder sofoca, matando todo romance, lo convierte en farsa o una comedia de mal gusto, grosera y vulgar.

Asi acaba todo anhelo, con la temida indiferencia, con no desear esconderse en el borde se su clavícula, que su caminar por el mundo se convierta en una noticia muda y sobre todo llamándole por su nombre a los conocidos, ya que no se guarda mas secreto, no es más un misterio.