viernes, 6 de marzo de 2015

La tragica virtud de ser indigerible

Infinidad de muestras de falta de respeto, intolerancia, desmesurado despreció y un sin fin de acciones que acompañan la destrucción de conductas socialmente aceptables, son la causa de que ahora me encuentre en soledad, sentado en el piso de la cocina intentando explicar el porque de tragica virtud de ser indigerible.

Soy un profesional maginifico, un camarada mental fenomenal pero como individuo social... el horror, el horro. Debería de sentirme mal, de ser usado como vínculo para otros medios, debería de añorar que miren mis virtudes y las aprecien,  debería aspirar a ser un centro, un objetivo, una razón, debería sentirme mal con mi vida social, debería... pero no lo siento. Pero no es esto algo de lo cual jactarse, es despreciable como las personas usan la incapacidad social como un medio de rebelión o dureza genial, "lobo solitario sin amor que busca el lugar en la tierra lo mas despoblado para vivar en paz, porque tiene fobia social y no soporta lo imbéciles que son los otros"
¿Quién carajos les explicó que los lobos son solitarios?... hasta donde se habitan en manadas de mas lobos, maaaaaas lobos. Buscar un lugar dela tierra sin ningun habitante... supongo son lo suficiente autosuficiente para hacer tela para ropa y asi cubrir sus cuerpos del frio para empezar, somos una sociedad porque todos se benefician de todos en mutuo acuerdo ( no es asi siempre pero se puede partir de eso). Todos son imbéciles, todos somos imbéciles en algo siempre se es imbécil y todos en la mañana parecemos imbéciles y borrachos mega imbéciles y seudosabios también imbéciles, yo ahorita soy imbécil quejandome como imbécil de los imbéciles.

Infinidad de muestras de falta de respeto, intolerancia, desmesurado despreció y un sin fin de acciones que acompañan la destrucción de conductas socialmente aceptables, son la causa de que ahora me encuentre en soledad, sentado en el piso de la cocina intentando explicar el porque de tragica virtud de ser indigerible recae en ser imbécil.